Thursday, August 24, 2006


Algún momento de agosto, 2006.

Del verde espeso y la veraniega depresión:

Estoy lejos ahora de todo lo que conocía antes... hay una cáscara pastosa alrededor mío hecha de cabello que se cae en la regadera y recuerdos de una vida a la que renuncié en un punto.. en este año del diablo, es que ha venido el diablo a tentarme, y me habló de lo que soy en la parte obscura de mi propia luna, de mi mente, y me hizo recordar... me mostró su espejo negro en el que humeaba mi figura y pude reconocerla y la vi como bordada de fragmentos muy claros, retazos de todo aquello que detesto... los espejos no mienten.... yo si... yo soy la cáscara misma. Que endiablada desilusión. Time to redirect... the whole damn thing... the whole sweet thing.


In trutina mentis dubia,
Fluctuant contraria,
Lascivus amor,
Et pudicitia...

Sod eligo quod video,
Collum iugo preveo,
Ad iugum tamen,
Suave… suave transeo.

Canti profani.

Wednesday, August 09, 2006

Los Monólogos del chichifo




Borracho de humo anoche, muy borracho toda la noche, humo, hierba y licor. Un ejemplar espécimen de la profesión más antigua del mundo. Ligar con un chichifo es como brincarte a six flags por atrás y no pagar. Un cuerpo tibio, hermoso y sin inhibiciones rompió por una noche el maleficio que me he venido tejiendo los ultimos meses. Chichifo, lo era o lo había sido, no estoy seguro, sea cual sea el caso, era bueno, era un buen chichifo. Downsides? seguro que si, uno al menos:

Que difícil es que una persona se siente frente a ti y te monologué por horas, de hecho, la mayoría de la gente que conozco lo hace. Honestamente, quien demonios en su sano juicio pensaría que a alguien le resultaría interesante conocer todos los detalles y minucia en la vida de alguien más, especialmente si ni siquiera conoces a la persona. Si llegase a haber algo que pudiera decirse he aprendido en mis años dando clases de idiomas a oficinistas maniáticos, es que la gente tiene una profunda necesidad de ser escuchada. Una clase es, sin duda, un espacio ideal para ello, mucho más si la clase es particular. Aún en estas alturas me resulta difícil de creer que la inmensa mayoría de las clases particulares que he dado en mi vida han sido sesiones de parloteo compulsivo en las que el alumno se vacía de todo aquello que le quema por dentro, por trivial o estúpido que ese algo pueda ser y lo avienta contra mi como si fuera una papa caliente. A veces siento que se me paga por sonreir, arquear ligeramente las cejas, clavar la mirada y mover lentamente la cabeza de vez en vez, siguendo el suave murmullo de la voz que viene del otro lado, mientras que la gente vomita su verborrea sobre mi ... vaya trabajo si se le ve desde esa perspectiva, aunque también puedo decir que mi trabajo me ha enseñado a ser paciente y mejor que nada, me ha preparado para no desesperar aún en las más extremas de las conversaciones. Mi mente entonces, se dirije hacia algún lugar muy adentro de mi y puedo permanecer ahí durante horas... mi trabajo consiste en gran medida en cosechar los sabrosos frutos del noble árbol del interés fingido.

En el caso del chichifo, no me estaban pagando, pero ¿que demonios? él tampoco me cobró a mi, así que a final de cuentas, pasamos la noche haciendo lo que cada uno sabe hacer mejor con el fin de que el otro se sintiera bien... y lo mejor del asunto ¡¡nadie cobró por ello!! ESO ES COOPERACIÓN SEÑORES! y en la cooperación yace nuestra última esperanza como especie.